¿QUÉ PODEMOS Y QUE NO PODEMOS DECIR A NUESTROS NIÑOS EN NUESTRO LECHO DE MUERTE.?

En unos años, el mundo no será el mismo que conocemos actualmente.
La situación es tan crítica que nos obliga a enfrentar la realidad: a menos que hayamos hecho todo lo posible para evitar lo peor, todos tendremos una responsabilidad para con nuestros hijos.

Y quizás querremos disculparnos.